Ayer 28 de enero falleció Pepe Sanz, a la mayoría de lectores de este blog puede que este nombre quizás no les diga nada, pero realmente para el territorio que nosotros abordamos es sin duda uno de sus 'hijos pródigos'. Pepe Sanz fue hijo de los 'camineros' que había en el puerto de Piqueras, una casa en la cual vivía toda una familia y en la cual conocieron en primera persona los avatares de los años cincuenta y sesenta principalmente en dicho puerto. Piqueras era la zona de paso y tránsito de las tierras de Castilla hacia La Rioja y País Vasco, subirlo y bajarlo costó muchas penalidades a miles de personas en aquella época, y más si le sumamos los rigores invernales, mucho más intensos en aquella época. Por la zona riojana la salvaguarda se encontraba en la Venta de Venancio, actual Venta de Piqueras, para la zona soriana, la casa de los camineros y La Póveda.
Pepe Sanz, fue un gran amante de su tierra, un ejemplo de 'querencia' hacia su Soria y su Almarza, su voz se ha apagado tras luchar contra una larga enfermedad, voz que por cierto echaremos de menos.
Aportó su granito de arena a numerosas obras culturales, en nuestro caso a '111 citas entre Urbión y Cebollera', ya que tenía un 'doctorado' en las vivencias en el Puerto de Piqueras. Nos explicó lo duro y bonito de su infancia en aquella casa de camineros, los inviernos interminables, las montoneras de nieve que llegaban a tener cerca de cuatro meses el puerto cerrado (algo impensable hoy), la historia de la Tiparraca o el papel de Piqueras y los contrabandistas que lo atravesaban en época de posguerra.
Sin lugar a dudas una gran pérdida, pues era todo un libro abierto y con un corazón enorme.
Desde aquí trasladamos nuestro pésame a su mujer y sus dos hijos, Pepe descansa.
Fotos de lo que era el Puerto de Piqueras en 1965, con su refugio en la parte baja, el cual ya no existe y una quitanieves de la época. Fotos de Gregorio Sanz.
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